Un breve recorrido por el planeta desde algunas de mis reflexiones personales sobre el uso que se da de el.
Un planeta ridículo
El planeta tierra, que burbuja mas grande llena de poder individualizado, accidentes que somos de la naturaleza, accidente toda nuestra inmensidad y universo conocido y no conocido y de lo único que nos hemos encargado es de explotar nuestra mente en direcciones erróneas para el lucro de pequeñas sociedades repulsivas que se creen dueñas de algo tan incontrolable como impredecible.
Todos y cada uno de nosotros creemos en nuestra raza como una raza suprema y divina, que dispone de los recursos necesarios como para poder afrontar cualquier situación que se presente ¨dentro¨ de nuestro gran dominio donde nos explotamos los unos a los otros y hacemos oídos sordos por nuestro ridículo bienestar y tiempo vital, somos participes de una creación errónea, de unas culturas, creencias fracasadas y ridículas que son las que sostienen nuestro equilibrio instintivo y no nos hace actuar como lo que precisamente no aceptamos ser.
Esta no aceptación hace que tengamos un alter ego que es el ´ser humano¨ donde vivimos en un yo completamente idealizado, no niego que seamos una especie muy inteligente, lo que si discrepo es que seamos una especie acertada en sus decisiones, una especie inteligente no deja que otro espécimen de su misma anatomía y condición ponga ante el reglas de conducta toxicas para el bienestar de sociedades que necesitan de esa sumisión y de ese control numérico de masas en la tierra, introduciendo en sus mentes datos que crearan un orden existencial y una conducta hipnótica de alguna manera, yo no digo nacer, crecer, reproducirse y morir.
Yo digo, nacer, absorber, desear, poseer, ver clases por debajo de la tuya, aceptar, tolerar, crecer, obtener, resignar, firmar, emular, fingir amor por coito vitalicio, reproducirse (si diera el caso), esposarse a unos impuestos vitalicios, resignarse y tener la falsa creencia de un termino desconocido y creado para el delirio y el éxtasis existencial basado en aceptación entre individuos como la supuesta felicidad y el amor en el mejor de las casos y morir y dejar que tus hijos luchen por el mismo código de intereses individuales.
Es totalmente ridículo que con plena libertad nosotros mismos nos la hayamos arrebatado de algún modo hasta el fin de nuestros días y de nuestra especie y civilización, solo leer las definiciones que usamos para referirnos a nosotros como grupo, me sobrevienen ganas de reír, Humanidad, civilización, raza, sin darnos cuenta somos separatistas y egoístas ya por naturaleza inconsciente, que creamos de la nada la religión para el tratamiento de los miedos colectivos como la muerte, es lógica esa creación y lógico es que aun siga entre nosotros porque en si no hemos cambiado, ni progresado moralmente en ningún sentido que haga mejores nuestros días, sino todo lo contrario, conformarse con ochenta años llenos de servicio al estado capitalista para supuestamente mantener el orden entre sociedades, necesita de fuertes analgésicos y me basta con decir, que se a hecho un buen trabajo con la línea obtenida hasta ahora, como para deducir que hubiese funcionado cualquier otra utopía terrestre con un mínimo de orientación al equilibrio global, hubiese funcionado un analgésico favorable a todo ser, por supuesto. No me cabe de ninguna duda, porque en parte estamos hechos para obedecer, y eso hemos hecho hasta hoy fatídicamente y en la dirección opuesta a la luz del túnel.
Creo que es únicamente necesario ver, como somos capaces, todos y cada uno de nosotros de considerarnos mejores por el único, simple y mero hecho de observar que otro individuo posee y tiene menos que nosotros, considerándonos afortunados hasta el fin de nuestros días, absurdamente beneficiados de un azar social y de un patrimonio obtenido a lo largo de nuestra existencia que también se convierte en azar y en propiedad de otros y en analgésico existencial, muchos de vosotros pensareis que es un tema tabú, nadie habla de si mismo como unidad si os dais cuenta, de unidad y positivamente, aceptamos agruparnos patrióticamente y universalmente como unidad, pero creamos abismales individualismos morales entre nosotros que no nos permiten ver mas allá de nuestra situación y de la baldosa que estamos pisando en ese instante, una manifestación por ejemplo, para recurrir derechos ¨humanos¨ me parece otra acción ridícula, ya que en si, no se desea profundamente el bienestar del que ondea la bandera a tu lado, no se desea el bienestar para el que debate cada dia contigo la situación y jerarquía existencial del planeta y de la moralidad que perdura desde nuestra existencia en formas distintas, sino que se desea un bien única y exclusivamente personal y no se pide libertad, se pide que no se cree un estado de caos, que no se acaben los analgésicos, que sigan los mismos latigazos subliminales entre las sociedades de todo tipo, para vivir una vida lo mas sumisamente posible, domado y controlado, seamos realistas.
No estamos preparados para ningún derecho humano, ya que privamos a otros de tenerlo conjuntamente, no creo en el libre albedrio, por supuesto que no, ni en la anarquía, pero en lo que de verdad no creo es en los valores de hoy y en un sistema o porque no llamarlo ¨circuito cerrado¨, Nos hemos complicado la vida y se la hemos complicado a existencias que quizás sean mas libres que los que dedicamos o tenemos conocimiento de una panorámica real de un planeta ridículo.
Maverick.