Todas las áreas de nuestro cuerpo requieren de proteinas, consiguientemente, nuestra salud depende directamente de una dieta proteinas altas.
Las dietas proteicas que cuentan con un nivel saludable y sano, son excelentes para mantenernos libres de antojitos o de sufrir hambre continuamente. El organismo absorbe las proteínas altas y envía un aviso al cerebro y de esta manera, evita que usted sienta deseos de comer o caiga en la tentación de ingerir calorías innecesarias.
Como sabemos, el metabolismo basal o en reposo, debe mantener nuestro sistema funcionando durante las 24 horas del día, todos los días, dicho de otra manera, necesitamos respirar, el corazón debe cumplir su función constantemente, inclusive cuando dormimos. La dieta con proteína activa nuestro metabolismo y aparte de realizar estas funciones, ayuda a mantener la masa muscular y quema calorías, aun sin realizar actividad física intensa.
La masa muscular disminuye con el paso del tiempo y si no somos físicamente activos, lo que sucederá es que acumularemos grasa perjudicial y nos sentiremos debilitados y con baja energía Esta es una de las razones por las que la dieta con proteínas altas es excelente para conservar nuestro metabolismo en niveles óptimos.
Otra ventaja de las dietas proteicas, es que disminuyen la rapidez con que el nivel de insulina y glucosa en la sangre suben y bajan. Cuando usted siente ansiedad por algo dulce o carbohidratos, significa que su ingesta de proteína es deficiente y su organismo le está reclamando eso, “Proteínas”, sin embargo, cometemos el error de identificarlo como hambre o cansancio.
Generalmente cuando nuestra dieta de proteínas es deficiente, aumentamos de peso debido al consumo de exceso de calorías vacías. Entonces, recurrimos a una dieta para adelgazar. Elija alimentos para adelgazar sano, también hay diferencias en estos, pues algunos contienen niveles mas altos de proteína que otros. Entre los más recomendados, conocidos como comida para el colesterol alto, se encuentran las proteínas vegetales del fréjol de soya, y estos se encuentran en perfectas cantidades, en jugos para el colesterol, elaborados en base a estas proteínas.