Renovar los espacios en el hogar son una oportunidad para sorprender a sus invitados.
Quizás hayas buscado en Internet sobre distintos consejos de estilo, forma, color y tipo de tejido.
En algunos casos la decisión es un poco abrumadora, pero no te preocupes, aquí algunos consejos para tener la información que necesitas para elegir la alfombra perfecta para cada habitación.
Materiales de la alfombra
Los materiales de la alfombra tienen estrecha relación con su costo y calidad. Pero antes que nada, tu prioridad al elegir una alfombra debe ser elegir un material que se mantenga intacto en tu vida diaria.
Si en el hogar hay niños y mascotas, es importante elegir una fibra de alfombra que sea duradera y fácil de limpiar, como lana o sintéticos. Como regla general, cuanto más largas sean las fibras, más confortable se sentirá tu alfombra.
Si hay miembros de tu familia con bastones, andadores o sillas de ruedas, conviene elegir una alfombra de pelo bajo con bordes seguros.
Las personas con alergias querrán tener mucho cuidado por lo que podrían probar las alfombras de yute que están elaboradas con tejidos orgánicos o hierba marina. Sin embargo, hacer cosas simples, como quitarse los zapatos cuando está en casa, también reducirá la cantidad de suciedad.
Cuanto más sepas sobre el pros y los contras de cada material de alfombra, más feliz estarás con la compra. No importa qué tipo de alfombra tengas, con un poco de cuidado y atención mantendrá tu alfombra en buenas condiciones.

Tamaño y ubicación de la alfombra
Uno de los errores más comunes que cometen los compradores de alfombras por primera vez es elegir una alfombra que sea demasiado pequeña para su espacio.
Recuerda, una alfombra no es un relleno, es un punto focal. Una alfombra demasiado pequeña se ajustará a su habitación como un par de aguas torpes.
Una alfombra que es demasiado grande se verá desprolija.
Al igual que comprar un atuendo nuevo, encontrar la alfombra del tamaño correcto se trata de un ajuste cómodo.
¿La buena noticia? No necesitas un ojo de águila para evitar el mal tamaño de la alfombra. Puedes utilizar una cinta de pintor para marcar dónde colocar tu alfombra y medir el área. En tu sala de estar, las patas delanteras de sus asientos deben encajar en los bordes de una alfombra para cerrar una conversación.
En el comedor, debería poder retirar su silla de la mesa sin enganchar los bordes.
En una habitación, tus pies descalzos deben tener un confort suave, sin importar de qué lado de la cama salgas.
Estilos de alfombras
Es importante encontrar el estilo de alfombra que no solo refleje tu personalidad, sino que también se vea bien con el resto del ambiente y muebles. ¡Las opciones son aparentemente infinitas!
No existen reglas estrictas y rápidas para elegir un estilo de alfombra, pero muchos diseñadores recomiendan imitar la forma de la habitación, un elemento de diseño clave o un mueble.
Por ejemplo, una elegante mesa de centro de metal combina bien con una alfombra de sisal dura si quieres salir como un urbanita industrial. Yendo en la dirección opuesta, colocando algunas alfombras con flecos de tela de tapicería le dará a su hogar un ambiente bohemio.
Es probable que tu estilo de vida y tus deseos de diseño no coincidan perfectamente. Conocer sus principales prioridades, como la durabilidad, la limpieza, el costo o la comodidad, lo ayudará a reducir sus opciones al elegir el estilo de alfombra de área perfecta.
Patrones de alfombras
El diseño no siempre es instintivo, especialmente cuando se trata de elegir un patrón de alfombra. Para ayudarte a encontrar un patrón de alfombra que complemente tus otros muebles y accesorios, usa estas estrategias simples:
Si tus paredes y muebles son neutros, prueba con una alfombra con un patrón llamativo para agregar algo de energía. Una alfombra aportará colores y formas llamativos. Para lograr más profundidad, puedes obrar con un patrón de alfombra con detalles ornamentales, como una alfombra oriental con un motivo persa o marroquí.
Si tus paredes o muebles son más coloridos o tienen un patrón de letra grande, prueba una alfombra con un patrón sutil y tonal. No quieres que tus piezas luchen por la atención. Encuentra la belleza en la simplicidad. Una alfombra con un diseño más clásico en sólidos o rayas aún ayudará a unificar su aspecto sin ser el escaparate de su diseño.
Color de la alfombra
Elegir un color de alfombra es similar a elegir un color de pared. Las paredes oscuras, los muebles y las alfombras pueden hacer que una habitación pequeña parezca aún más pequeña, mientras que una paleta más clara puede abrir visualmente el mismo espacio.
Si necesitas una alfombra que pueda resistir el derrame ocasional de café o una cría de niños que se tambalean después de una pelea de bolas de nieve, elija una con tonos profundos. Los colores más oscuros ocultan el desastre que la vida deja atrás.
Para diseños brillantes y lujosos, busque los pigmentos naturales de una alfombra anudada a mano. Un índigo o una alfombra de damasco color borgoña se verán como si sus tintes fueran extraídos de las plantas de la selva.
Si prefieres una alfombra con tonos de montaña o tonos costeros serenos, elige colores terrosos. Una alfombra con una paleta tan sutil y neutral es como un lienzo en blanco, que le permite usar sus almohadas, lámparas, mantas y otros accesorios para dar color a la habitación.
Otra táctica que creará un aspecto unificado y sin costuras es hacer coincidir su alfombra con los colores decorativos existentes en la habitación. Si eliges este camino, es fácil cambiar los accesorios a medida que cambian las estaciones o las tendencias.